lunes, 9 de noviembre de 2015
ARQIndustria
Desde el nacimiento de la
industria, nadie podría haberse
imaginado de las grandes dimensiones y aplicaciones que esta llegaría tomar y
de la enorme repercusión que tendría en nuestra vida y el desarrollo futuro de
nuestra sociedad. La producción industrial tiene infinidad de aplicaciones,
pero como es evidente en esta asignatura me he centrado especialmente en el
ámbito de la arquitectura.
Aunque en un principio la
arquitectura no se benefició del enorme potencial y del gran abanico de
opciones que la industria ofrecía, como ya manifestó Le Corbusier en “hacia una
arquitectura”, poco a poco son cada vez más los elementos prefabricados que
forman parte día a día del arquitecto, que van de meras vigas de hormigón armado
a módulos completamente amueblados. En nuestro tiempo es casi imposible no beneficiarnos
de las ventajas que la industria aporta, nos hemos de adaptar a los nuevos
tiempos y a los nuevos desafíos que se nos presentan. Paralelamente a este
avance aparece otro problema: unas nuevas formas y técnicas de construcción necesitan
de una nueva manera de plantearlas y entenderlas, y esto es lo que las nuevas generaciones
de arquitectos deben aprender. Una vivienda se tiene que concebir como un
conjunto de elementos que concuerdan entre sí, que viven en armonía y se
respetan, cómo un puzle en el que sus infinitésimas piezas concuerdan y se nos
presentan como un único elemento. Los problemas aparecen cuando al arquitecto
no se le enseñan estas nuevas formas de entender la construcción y plantea una
vivienda como un conjunto de elementos prefabricados sacados de un catálogo que
sí, se sostienen, pero que no se entienden entre sí y no siguen una idea
coherente.
La industria y sus técnicas han
sido la solución de muchos de los problemas que se nos han planteado desde su creación,
y ante la enorme crisis en la gestión de los recursos que estamos sufriendo,
cuestiones como la reutilización y el reciclaje o la reducción del consumo solo
pueden tener respuestas eficientes en el entorno de una producción
industrializada. Por ello hay que dar a conocer y aprender a controlar el
enorme potencial de la industria, porque sólo de ella y de cómo la orientemos
decidiremos nuestro rumbo.
Etiquetas:
Industrialization,
Prefabrication,
technology
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